"The Death of Cleopatra," painted in 1892 by Reginald Arthur. |
Los especialistas rechazaron en concreto lo referente a la serpiente que habría estado implicada en la muerte de Cleopatra y de dos de sus doncellas en el mismo momento dentro del palacio de la reina, sin que nadie lo haya notado. En principio, una serpiente (o cobra) venenosa de Egipto habría sido demasiado grande y pesada como para haber podido estar oculta en una canasta de higos, traídos del campo, que fue llevada hasta donde se encontraba la reina.
De acuerdo con Andrew Gray, experto en herpetología, una rama de la zoología que estudia los anfibios y reptiles en el Museo de Manchester, las cobras puede típicamente medir desde 1.5 metros hasta 2.5 metros de largo, “demasiado grandes como para ocultarse fácilmente”. El egiptólogo Joyce Tyldesley refirió que el relato antiguo sobre la muerte de Cleopatra señala que la cobra también mordió y mató a dos de sus doncellas, pero “habría muy poco tiempo para morderlas a las tres”. Además, el veneno de una serpiente provoca la muerte de una persona “muy lentamente”, en todo caso habría sólo una posibilidad del 10 por ciento para que sucediera, pues “la mayoría de mordeduras son secas, no inyectan el veneno”, precisó. “Eso no quiere decir que no son peligrosos: el veneno provoca necrosis y sin duda puede matar, pero muy lentamente. Así que sería imposible usar una serpiente para matar a dos o tres personas, una tras otra, porque las serpientes usan veneno para protegerse y para cazar”, dijo. “Es decir, las serpientes conservan su veneno para utilizarlo en momentos de necesidad”, agregó, citado en reportes de la cadena pública de noticias BBC. Cleopatra está fuertemente asociada con las serpientes, al igual que muchos reyes y reinas del antiguo Egipto. Además, se creía que ella era la encarnación de la diosa Isis y que podía tomar la forma de una serpiente. Tyldesley, quien escribió el libro “Cleopatra: Última reina de Egipto”, afirmó que sólo uno de los aspectos del relato ha demostrado ser correcto: los antiguos egipcios creían que las serpientes eran buenas madres. “Muy pocas serpientes tienen un instinto maternal, sin embargo la cobra es una excepción, protegen el nido hasta que nacen sus hijos”, coincide el doctor Gray. Cleopatra murió a la edad de 39 años y fue una gobernante de Egipto, que se vio envuelta en las luchas de poder dentro del imperio, pero su historia y su muerte se han convertido en parte de la leyenda popular, representada en películas de ficción.
https://egyptmanchester.wordpress.com/2015/10/21/snakes-unlikely-to-have-killed-cleopatra/